viernes, 12 de septiembre de 2008

“La psicología es jugar con ventaja deportiva”

Hace un tiempo leí un artículo del Lic. Marcelo Roffé, que trabaja en los equipos menores de la AFA desde hace cinco años, y me pareció muy buena su visión de cómo la ciencia puede ayudar a los deportistas para lograr su máximo rendimiento en la alta competencia.

En una entrevista que le hiciera Adrián De Benedictus, esto decía:

–¿Cuáles son los mayores reclamos de los deportistas?
–Lo que más buscan es controlar la ansiedad precompetitiva, descansar bien la noche previa a la competencia. Para eso los ayudamos con técnicas de relajación, respiración, con música especialmente seleccionada. También buscan tener las metas claras, estar motivados con objetivos a corto, mediano y largo plazo. Michael Jordan decía: “Todo lo que conseguí fue por ponerme metas cortas y realistas, y así fui armando el rompecabezas de mi carrera deportiva”. Y otro gran tema es el control de los miedos y las presiones, que merman el rendimiento del deportista o del equipo.
–¿Qué buscan concretamente?
–Ellos buscan fortalecer la autoconfianza para tomar mejores decisiones, porque alto rendimiento es eso, tomar decisiones rápidas y buenas. Vos no podés tomar decisiones lentas y buenas, ni tampoco malas y rápidas. Y rápidas no es apuradas. Esto es lo difícil en el alto rendimiento, saber elegir qué es lo que te conviene en el momento justo. En cualquier otro trabajo hacés todo bien y te va bien. Acá podés hacer todo bien y perder. También buscan estar concentrados, focalizados, aislarse de las presiones externas como puede ser del público, de los gritos del entrenador, de las cargadas de los adversarios, o de las presiones de los padres. Exterior o interiormente: por ejemplo, quedarse pensando en un error, enganchados e irse del partido. Cada deporte es una especialidad y tiene sus secretos. En los de conjunto se busca integrar bien al grupo y ayudar a transformar el grupo en un equipo. Que el nosotros sea más preponderante que el yo.
–¿Los tenistas son los que más consultas hacen?
–Ultimamente sí. Una vez Gaudio declaró que no les podía ganar ni a la mamá, y a los seis meses, después de haber trabajado con un psicólogo, ganó Roland Garros. Fue muy claro ese ejemplo. Pero no ganó sólo por la preparación psicológica. Primero está el talento. Y en los deportes de equipo, el psicólogo tiene que pasar más inadvertido, no tiene que confundir que el protagonismo verdadero lo deben tener el jugador y el entrenador. Hoy se dice que los 100 mejores jugadores del mundo de tenis son muy parejos técnicamente, pero los que están entre los diez primeros son los que mejor adaptación tienen a situaciones de estrés. A los viajes, a los cambios constantes, a las crisis. En los deportes individuales, esto de jugar con ventaja, que puede ser la preparación psicológica, toma más auge y cada vez se van convenciendo más. Hay dos maneras de jugar con ventaja una vez que se equipara lo técnico, lo táctico y lo físico, y una es legal y ética, que es la preparación psicológica, la que termina torciendo el curso de un resultado. La otra, que lamentablemente muchos escogen por esto de ganar de cualquier modo, es muy reprochable y está reñida con la esencia del deporte: el doping, que es jugar con ventaja extradeportiva. En cambio, la psicología en el deporte es jugar con ventaja deportiva.
–Precisamente Gaudio, con todos los vaivenes emocionales que exhibe, ¿es un caso especial?–Todos son casos especiales, desde que cada persona es única, insustituible, y cada uno tiene su historia. Cuando se habla en términos de éxito y de fracaso, a veces el periodismo es muy duro. Cómo hacés para saber si alguien fracasó si no conocés las metas que tenía. Vos fracasás en relación a las metas que te pusiste. En natación vos podés tener tres tipos de metas distintas que no son excluyentes entre sí. Podés tener como meta estar en el podio, mejorar tu marca individual en segundos o pulir tu estilo personal de nado. Son todas distintas, entonces si dicen fracasó porque salió tercero en lugar de primero no es real porque tal vez el objetivo era estar en el podio. Ahí está este “otro evaluador”, que hace que a veces el deportista prefiera no leer los diarios o no escuchar nada porque lo daña moralmente.

–En esta actualidad donde se busca el éxito permanente, ¿un deportista de elite necesita psicólogo?–Yo no soy de la idea de que todos lo tienen que tener, como en la clínica todos tienen que hacer terapia. Seguirán saliendo campeones sin psicólogo. Porque lo más importante es el desempeño, y ganar o perder es una consecuencia del desempeño, que a su vez es una consecuencia del entrenamiento. Entonces hay que preguntarse si se hizo todo lo que se podía o todo lo que estaba al alcance. Ahí se pueden dar cuenta de que en lo psicológico no se estaba trabajando y que se está guardando algo. En ese sentido es una elección y muchos no lo eligen porque no conocen los alcances o las virtudes, y hay muchas experiencias buenas que preferimos que pasen inadvertidas. Hubo malas experiencias cuando se hizo marketing con el tema de la psicología en el deporte, revelando el secreto profesional. Aparte, el deportista valora mucho que el psicólogo no aparezca. En mi caso sólo hablo cuando sale un libro porque es mucho esfuerzo publicarlo, y uno como autor quiere que lo lean. En este libro hay trabajos que reflejan deportes individuales y deportes de equipo. Y las tendencias actuales que hay hoy en el mundo.

–¿El reclamo de un deportista amateur es distinto?

–Nosotros partimos de la idea de que el 90 por ciento de los deportistas es normal. Lo que pasa es que el juego devino deporte y el deporte devino negocio. Es como una deconstrucción negativa. Cuando el deporte de alto rendimiento introduce el tema del dinero, ya mitad es salud y mitad es enfermedad. Hay deportistas que son sanos y normales hasta que tienen fama, empiezan a tener dinero, el entorno se transforma. Aparecen los aduladores, los amigos del campeón, las novias del campeón, los dirigentes, los periodistas. Una serie de cosas que antes no estaban. Y cuando el lugar del psicólogo no se ocupa, se ocupa mal porque lo ocupa el entrenador, el preparador físico, el kinesiólogo, o el médico.

–A largo plazo, ¿ustedes buscan que el deportista rinda más o se sienta mejor de la cabeza?–Primero que se sienta bien con él mismo, suelto. Con eso, tarde o temprano, va a rendir mejor. No son máquinas.

–El ejemplo de joven deportista exitoso parece ser el del español Rafael Nadal. ¿A los 19 años se puede soportar tanta exigencia triunfalista?

–Lo que está claro es que cada vez son campeones más jóvenes y cada vez se retiran más temprano. Hay apuro por llegar y, en el fútbol, apuro por emigrar. Hace poco los periodistas especializados decían que entre Federer y el segundo había un abismo, y en Roland Garros ganó Nadal. Es difícil hacer futurología en el deporte, predecir. Lo que sí se puede es achicar los márgenes de error, y la psicología en el deporte trata de achicarlos. El mejor ejemplo es Tiger Woods, que siendo número uno no se cree el mejor, sino que trabaja para ser el mejor. Ganó todo y quiere seguir mejorando. Eso pasa muchas veces, que el dinero fagocita la motivación interna. O sea, lo exterior fagocita lo interior.

jueves, 10 de abril de 2008

¿ADICCION AL DEPORTE?

Todos los que alguna vez participamos del deporte a nivel competitivo, que implica una actividad física sistemática, repetida, que se convierte en habito, hemos experimentado la hermosa sensación de sentir cada músculo de nuestro cuerpo, sentir que la sangre circula a mayor velocidad, que el oxígeno llega a nuestros pulmones y nos parece incluso que si prestamos atención podríamos percibir como cada célula de nuestro cuerpo produce ese intercambio de oxígeno y dióxido de carbono. Obviamente esta sensación inigualable, tremendamente placentera, nos genera la necesidad imperiosa de volver a percibirla como tal, entonces nos pasa que aquel día que no hacemos actividad física nos falta algo, hasta nos sentimos de mal humor, nos parece que no estamos vivos si no nos movemos. Entonces nos preguntamos …. ¿Qué es lo que produce todo esto?

Indudablemente hay una explicación fisiológica y la misma radica en unas hormonas llamadas B-endorfinas, que son como una heroína endógena. Si, análogas en sus efectos a la droga, y como tal nos crea esta “adicción”, esa necesidad imperiosa de hacer ejercicio, de competir, de vivir muchas veces situaciones de riesgo, “sensación de volar”, de haber conquistado algo cada día a través del movimiento, de sentir ese “placer”, y todo esto significa además que como toda droga tenga la propiedad de producir “tolerancia”, por lo tanto en mayor o menos grado necesitamos cada vez dosis más altas para reproducir el efecto anterior, el mismo efecto placentero. Y entonces vemos cómo alguien, que comenzó saliendo a caminar o correr por placer, termina corriendo una carrera de calle, luego no le alcanza y se anota en una carrera de aventura, y como esta carrerita no le alcanza, necesita más vértigo, más desafío, más esfuerzo, llegar más al limite, y es esto en definitiva una verdadera adicción, que puede llegar a ser tan peligrosa como la falta total de ejercicio.-

Hoy estamos asistiendo a estos dos fenómenos: la falta de adherencia, continuidad y participación del ejercicio por un lado, y esta peligrosa adicción por otro. Como siempre, el equilibrio justo, todo en su justa medida y a su debido tiempo, también se debe aplicar a la práctica deportiva y a las actividades físicas, este será el próximo gran desafío para los organizadores de carreras que, aparte de fomentar el deporte y la participación, tengan en cuenta la salud de los corredores.-

Sergio Lüscher – Manual de Deporte Aventura

martes, 28 de agosto de 2007

Cómo hacer de tu bici tu punto fuerte…

El invierno es la estación del año que se caracteriza por recorridos salidas o circuitos fijos, largos y lentos, en el modelo típico de planificación del entrenamiento. Pero ¿es esto realmente lo que deberías hacer?

¿Qué te parece mejorar la velocidad de tus piernas, trabajando en una mejor técnica de pedaleo, con ejercicios que aumenten tu potencia y velocidad con la bici? En todos los deportes en los que intervienen más de un deporte, sos tan fuerte como tu deporte más débil. Por lo tanto, durante esos meses de frío invierno con pocas horas de luz de día, tus ejercicios deberían estar basados en la calidad y no en la cantidad.

El triatlón es, básicamente un deporte de resistencia; sin embargo, también es un deporte de máxima potencia. Durante una carrera intentás cubrir determinada distancia de la manera más rápida posible. En otras palabras, estás tratando de hacer el trabajo, pedaleando más rápido y con más potencia, en la menor cantidad de tiempo posible. Aquí es donde entra en juego el concepto de potencia. Para mejorar el tiempo en de carrera, debes aumentar la potencia en el umbral de lactato.

La pregunta es ¿cuál es la manera más efectiva de lograrlo durante el invierno?
La respuesta es: las pasadas. Hay infinitos tipos de pasadas que podés realizar durante tu entrenamiento; sin embargo, debés estar seguro de que estás realizando el entrenamiento apropiado si aspirás a obtener los mejores resultados ya en primavera. Mantener una alta cadencia durante una carrera debería ser la meta de todo triatlonista, si tu ritmo es de 80 a 85 revoluciones por minuto (rpm) o menor, en una prueba de 40 km, este invierno deberías concentrarte en mejorar tu velocidad de las piernas. Durante los entrenamientos y las carreras querés evitar una cadencia baja, pues ésta implica un esfuerzo importante de músculos y tendones que puede llegar a producir lesiones. La cadencia promedio para los atletas de primer nivel es de más de 95 revoluciones por minuto en una prueba contrareloj de 40 km. Una manera fácil de incorporar un pedaleo veloz en la bici es incluyendo el pedaleo a velocidad durante tu entrenamiento. Se debe recurrir al pedaleo a velocidad en una parte relativamente plana del camino. La carga (relación plato-coronas) debe ser ágil. Mientras te mantenés en el asiento, aumentá la velocidad de pedaleo, manteniendo tus caderas quietas, sin saltar en el asiento. Concentráte en empujar el pedal desde el fondo bien abajo hasta el punto más alto. Y tratá de mantener la cadencia a más de 100 rpm durante tres a cinco minutes, y tu pulso cardíaco irá aumentando mientras realices este ejercicio, pero no uses este dato para juzgar la intensidad de tu entrenamiento.

Otra clase de pasadas en el entrenamiento que ayudan a mejorar la mecánica de tu pedaleo es el pedaleo con una sola pierna. Este ejercicio se realiza mejor en una bicicleta fija, por lo cual es ideal para los meses de invierno. Mientras pedaleás, visualizá el pedaleo en círculos completos desde lo más alto hasta el fondo de cada ciclo del pedal. Vas a ir adaptándote lentamente a pedalear más despacio, pero necesitarás continuar concentrándote a lo largo del año en la manera correcta de pedalear. La duración típica de estas pasadas es de 30 a 60 segundos con cada pierna por pasada.

El modo más eficiente de llegar a tu record personal en la bicicleta para la próxima temporada es aumentando tu fuerza. Una vez que logres eficiencia en tu entrada en calor al pedalear (fase positiva), el próximo paso es trabajar para mejorar tu fuerza de salida (fase negativa). Esto puede lograrse incluyendo en tu entrenamiento de invierno pasadas de fuerza, esfuerzos cortos, intensos. Este ejercicio puede hacerse en interiores o en un camino relativamente plano. La carga debe ser moderada, pero la cadencia del pedaleo debe ser alta (de más de 100 rpm).
Tomate un minuto para lograr el entrenamiento de fuerza deseado, y luego mantené esta intensidad durante el resto de la pasada.
Durante los últimos dos minutos de cada pasada es cuando el cuerpo comienza a alcanzar su máxima capacidad aeróbica. Si es necesario, pasá a una corona más liviana para mantener el ritmo, pero no dejes caer la intensidad del trabajo dentro de los tres minutos. Con una cadencia alta, tu frecuencia cardíaca va a mantenerse elevada y así vas a entrenar la capacidad de tu cuerpo para llevar oxígeno a los músculos.

Centrarse en el ciclismo a lo largo del invierno te permitirá agregar ejercicios de velocidad, de técnica y de resistencia a tu umbral de lactato, y antes de lo esperado notarás grandes progresos en tu capacidad como ciclista. ¡Buena suerte con tu entrenamiento de invierno!

Ejemplos de ejercicios

Pedaleo rápido y pedaleo con una pierna
Tiempo total del ejercicio: 1h 20mins.
20 minutos de calentamiento
3x5 minutos de pedaleo rápido (5 minutos de descanso entre pasadas)
2x3 series de pedaleo con una pierna de 30segs. (5 minutos de descanso entre series)
20 minutos de vuelta a la calma

Series de fuerza

Tiempo total del ejercicio: 1h 30mins.
20-30 minutos de calentamiento
2x30 segundos de apertura (1 minuto de descanso entre pasadas)
2x3 series de pasadas de fuerza de 30mins. (3 minutos de descanso entre pasadas, 10 minutos de descanso entre series)
20-30 minutos de vuelta a la calma

FUENTE: Lindsay Hyman, entrenadora (www.trainright.com), en Triathlete, December 2004, pp.68-69 - Publicado en F.C. Max

jueves, 10 de mayo de 2007

COMO MEJORAR LOS RECORDS PERSONALES

La Nación Deportiva - Viernes 29 de junio de 2007


Por Néstor Suárez


Tal vez no haya otro deporte en el que el resultado sea tan previsible y se sepa antes mismo de comenzar la competencia, como el running. Es que si uno se entrenó correctamente y a conciencia, seguramente podrá estimar con bastante precisión cómo y en qué tiempo finalizará una carrera.

Así, podemos dividir a los corredores en dos tipos o grupos:

1) aquellos que corren para vencer a los demás y
2) los que lo hacen para mejorar sus propios tiempos.

Los primeros son los que buscan un lugar en el podio, los que corren de una manera casi profesional si se quiere. Los restantes son los que compiten contra sí mismos, más precisamente, contra sus propias marcas y pueden ser ganadores sin vencer a nadie, y constituyen el grupo mayoritario de los que participan en todas las carreras. Y si bien estar conforme con una marca personal es muy bueno, lo ideal es no quedarse sólo con eso, pues esa marca, como todas las demás, fue establecida para batirla. Y eso es algo que sólo uno puede lograr. Para estos corredores, el premio real es mejorar su tiempo. Y la única forma de hacerlo es mediante un buen trabajo de entrenamiento, al que se agregarán propuestas tácticas y algunos tips que permitirán ir bajando segundos primero y luego minutos.

Algunos de estos tips son:

1) En la largada, ubicarse de manera tal que la cantidad de corredores que esté por delante no sea una barrera difícil de pasar. Es que en las carreras masivas se crea un tráfico denso e importante, que ocasiona una pérdida de tiempo importante si se busca mejorar una marca.
2) No correr como si se estuviera manejando un auto por la calle, o sea, sólo por la mano derecha y doblando prolijamente. No hay que olvidarse que el recorrido está medido por la parte de adentro y si uno decide seguir otra trayectoria estará agregando kilómetros y por ende más tiempo a la performance.
3) No se puede tener pensamientos negativos y esperar resultados positivos. Una mente positiva permitirá correr una mejor carrera.
4) Antes de planear cuán rápido vamos a correr una carrera, debemos ser lógicos y realistas respecto de nuestros objetivos y saber regular nuestra velocidad.
5) Una buena fórmula para calcular la velocidad es la siguiente: sumarle entre 17 y 20 segundos al tiempo que hacemos por kilómetro cuando la distancia de la carrera se duplica. Por ejemplo, si se pasa de correr una media maratón a una maratón, los corredores más rápidos y resistentes sumarán 17 segundos por kilómetro, mientras que los más conservadores deberán agregar unos 20 segundos.
6) No todos pueden correr rápido, pero sí todos pueden romper su propio récord personal. La mejor manera de hacerlo es ignorar a los otros corredores y concentrarse en el propio paso y la táctica de carrera.
7) Cada carrera son dos carreras de igual medida, pero en diferente contexto. Durante la primera mitad, que es la más fácil, se debe intentar guardar algo para la segunda parte; o sea, por más que se sientan energías para ir más rápido de lo planeado hay que saber que en la segunda parte se necesitará energía extra y que por eso hay que conservarla. La segunda mitad, en tanto, es realmente diferente; es durante esta que se comienza a sentir cansancio y dolor, y es cuando aparece la necesidad de hacer más lento el paso. Los malos resultados se obtienen por correr muy rápido cuando el corredor está fresco y muy lento cuando aparece el cansancio.
8) La primera mitad es la puesta a punto y la segunda mitad es cuando la perfomance toma lugar. Es en esta que cambia la lista de prioridades y durante la cual la técnica juega un rol importantísimo.

El autor es profesor de educación física, personal trainer y miembro de los Nike Running Teams

viernes, 13 de abril de 2007

ENTRENAMIENTO DE LA FLEXIBILIDAD EN EL CORREDOR DE AVENTURAS

De modo muy frecuente es posible escuchar al termino de los entrenamientos y carreras, frases tales como “estoy duro no me puedo mover “ , “ me duele todo “ etc .

Son sin duda el reflejo que nuestros músculos no solo están cansados sino que se encuentran muy contraídos y poco flexibles .Es por eso que aquí van algunas pautas para no sufrir estos problemas y lo ideal es entrenar unas de las capacidades importantes (junto a la resistencia, fuerza, velocidad ) en el entrenamiento deportivo que es la flexibilidad.

Este entrenamiento no puede ser tomado a la ligera ni dejar de estar programado específicamente en nuestros planes de entrenamientos.

Un altísimo porcentajes de las lesiones principalmente en deportistas de resistencia son producto de una baja flexibilidad muscular y articular del tren inferior

La mejora de la flexibilidad redundará a mediano plazo en una mejora sustancial en los tiempos de recuperación muscular, en una disminución notable en la frecuencia de lesiones musculares - articulares y en la mecánica de la carrera en un aumento de la longitud de la zancada.

Como se entrena esta capacidad

La mayor o menor flexibilidad de un deportista en un determinado momento depende de muchas causas entre las que se encuentran, la edad del deportista, los años de actividad física, el entrenamiento de esta capacidad hasta los 16 años, las condiciones climáticas, la hora del día, etc etc .

Esta capacidad logra desarrollar todo su potencial si el deportista la ha entrenado adecuadamente hasta los 16 años, no obstante ello el corredor de resistencia que ha comenzado la actividad con mas años puede optimizar la misma que obviamente no será la que potencialmente tendría si hubiera comenzado en la niñez y adolescencia a entrenarla.

Como, cuando y cuanto

El corredor de aventura debe planificar sus entrenamiento y tener -en la medida que este a su alcance- un entrenador que lo guié.

En el como de la flexibilidad es indispensable el asesoramiento del entrenador, existen en la bibliografía cientos de ejercicios de elongación, desde los muy simples, como tocarse la punta de los dedos del pie con la mano sin doblar rodillas, hasta el gran abanico de técnicas orientales tales como el yoga, el tai chi, el streeching etc.

En este punto es valida la Ley de Especificidad del entrenamiento que dice que un mismo ejercicio o rutina de movimientos no actúa de igual manera de un individuo a otro. Es aquí donde la tarea del entrenador es fundamental.

Como recomendación la sesión de flexibilidad debe ser realizada en un ambiente agradable, con una temperatura adecuada y con el tiempo necesario para lograr la relajación adecuada para llevar adelante correctamente la rutina de ejercicios.

También es recomendable realizar la sesión con un compañero que nos asista en los ejercicios, con ello se logra un mayor estimulo ya que se logran movimientos mas profundos y el trabajo resulta mas efectivo.

En el cuando entrenar la flexibilidad, se recomienda realizar las sesiones tendientes a la mejora de la flexibilidad separadas como mínimo 2hs del entrenamiento, siempre y cuando este no haya sido tan intenso que haya producido gran acumulación de ácido láctico.

Esto tiene una razón muy simple: se corren serios riesgos de lesión ya que los músculos se hallan muy fatigados para ser exigidos con elongaciones profundas.

Es importante en este punto diferenciar adecuadamente lo que son las sesiones especificas de mejora de la flexibilidad, de la elongación previa y posterior a un entrenamiento.

Estas ultimas forman parte del entrenamiento diario y no constituyen una sesión específica de mejora de la flexibilidad. No obstante se recomienda que en la entrada en calor los ejercicios de flexibilidad articular no deben ser inferiores a los 10 minutos y estos no debe ser de ninguna manera profundos ya que corremos riesgo de lesión debido a que el músculo bajaría de tono muscular y no estaría adecuadamente listo para el esfuerzo a realizar.

En la vuelta a la calma como mínimo se recomienda una duración mínima de 10 a 20 minutos y tampoco es recomendable que estos ejercicios sean profundos, ya que el riesgo que se corre es la fatiga del músculo.

Como regla general si los ejercicios de elongación duelen, no sirven en la vuelta a la calma ya que no cumplen el objetivo de ese momento que es relajar y recuperar el grupo muscular de la rutina del entrenamiento o competencia.

El cuanto se recomienda semanalmente entre tres y cuatro sesiones de entre 40 a 50 minutos para mantener lo que una ha logrado en la etapa de máximo desarrollo, si es que el corredor ha tenido la oportunidad de poder entrenar oportuna y adecuadamente esta capacidad.

Una o dos sesiones de entrenamientos no son suficientes para lograr resultados aceptables, pero por algo se debe comenzar y sería una buen frecuencia para comenzar.

Por ultimo recomendamos a todos lo aventureros tomarse un tiempito antes y después del entrenamiento para elongar adecuadamente y dedicarle además como mínimo dos días a la semana a trabajar esta capacidad que les reportara, sin dudas, mejoras sustanciales a su rendimiento

Claudio Herrero Entrenador
Grupos de Entrenamiento
www.pampasports.com.ar

miércoles, 28 de marzo de 2007

EL VERDADERO OBJETIVO DE TODO CORREDOR

LOS ESTADIOS DE UN CORREDOR

Según mi experiencia como corredor y entrenador, y luego de verme, y ver en los demás diferentes momentos por los que vamos pasando a lo lago del tiempo, e concluido en hacer esta clasificación de los diferentes estadios por los que a lo largo de la vida, pasa casi inevitablemente todo corredor.

1º Estadío: Corredor negado:

Está conformado por personas sedentarias que generalmente están abocadas a sus labores diarias, sin ver lo que pasa con su cuerpo. Suelen ser fumadores, generalmente toman alcohol y comen hasta llenarse sin preocuparse de cuantas calorías tiene los alimentos, o de que forma fueron cocinados. Son los que generalmente cuando ven a un corredor por la calle dicen: este no tiene otra cosa que hacer a esta hora?” o pero, te gritan “anda a laburar vago de m...” o simplemente te tiran el auto encima. Suelen ser también los que cuando se corta el trafico para una carrera, se pelean con todo el mundo, porque no pueden hacer el mismo camino de siempre. Las personas que están en este estadío no le dan ninguna importancia a la actividad física, y aún más, la consideran una pérdida de tiempo total.

2º Estadío: Corredor latente:

Quienes llegan a este segundo momento, no necesariamente tienen que haber pasado por el primer estadío, de hecho creo que hay personas que pueden permanecer toda su vida en este nivel, es uno del os más comunes, y vivimos a diario rodeados de cientos de ellos. Está conformado por aquellas personas que se consideran normales, que comen de todo, que generalmente no fuman ni toman alcohol y si lo hacen, suelen ser moderados. Son seres que consideran a la actividad física como una mera recreación, juegan al fútbol una vez por semana o en las reuniones con amigos y familiares (varones o mujeres da igual). Cada vez que se mueven quedan destruidos, pero no les importa, total para la semana próxima ya pueden volver a jugar un rato. Son personas que lejos de despreciar a los que corren, los admiran, los ven como superdotados, y la frase más común de ellos, al ver un corredor es: “Yo nunca podría hacer eso”. Son seres que logran ver claramente el deterioro que produce en su cuerpo la inactividad, y generalmente cuando cruzan a alguien con un cuerpo moldeado por el deporte, se miran la panza o la cola y piensan “... hasta donde se me ira a caer todo esto ....?” Son corredores latentes, ya que en cualquier momento se pueden atacar intentando lo imposible: salir a caminar o correr.

3º Estadío: Corredor principiante.

Llevados por un impulso de corredor latente, por un amigo, una novia, por un exceso de peso brutal, por un médico que ordena actividad física urgente, o por el simple hecho de probar algo nuevo, llegan cientos de personas a ser corredores principiantes. Este es el momento donde todo es nuevo, donde veo desde adentro a esos corredores a los que admiraba. Cada entrenamiento es un desafío personal para no dejar. Al profesor lo veo como a un ogro que solo saber hacer sufrir, contestándome a casi todo: “...ya te vas a adaptar...”. Los progresos son pequeños, las zapatillas nuevas, que hasta ayer estaban rebuenas, ahora no me sirven, y las remeras de algodón que tenía guardadas para la ocasión, ya no las usa nadie. Lamentablemente, muchas de estas personas quedan en el camino por el desanimo que produce el poco avance en los primeros entrenamientos, o por la imposibilidad de soportar las molestias musculares y articulares, propias del comienzo de la actividad.-

4º Estadío: Corredor entusiasta.

Ya lleva algunas semanas entrenando, se ha adaptado a la actividad, y ve que su panza se va transformando paulatinamente en músculos abdominales. Los pantalones le quedan igual que antes, pero el siente que ya cierran diferentes. Ahora puede trotar en forma continua, y hasta logra charlas mientras realiza la actividad. Empieza a darse cuenta que sus compañeros también tienen parte de adelante. Se ha comprado unas zapatillas supergalácticas, que nunca había imaginado usar, y esta pensando seriamente en adquirir unas calzas (antes pensaba que esta prenda sólo la usaban los bailarines!!!). El corredor que se encuentra en este estadío, ve todo maravilloso, correr con lluvia es lo más, cuando hay sol se siente pleno, si hay viento en contra se puede igual, y si sopla a favor se siente imparable. Ve a su entrenador como una especie de genio todopoderoso, que lo llevará a cambiar su vida para siempre. El corredor entusiasta, casi no se siente persona, se ve corredor.

5º Estadio: Corredor con número.

Este es el momento en el que el corredor comienza a participar de las primeras competencias, con algo de temor y nervios, logra disfrutar del antes, el durante y el después de la carrera. Es la etapa donde empieza a darle real importancia al plan de entrenamiento, se da cuenta que el entrenamiento no debe ser siempre igual, y generalmente comete dos errores muy comunes: el primero, entrenar más fuerte cuando se acerca la competencia, cree que esto lo hará rendir mejor, y el segundo, en la carrera misma, casi siempre sale rápido pagándolo al final (esto sucede aunque su entrenador le diga miles de veces que debe salir tranquilo o a ritmo). En este período también se cometen una gama muy variada de otros errores, como por ejemplo: el estrenar zapatillas en una competencia, no elongar, no entrar en calor lo suficiente, no hacer los circuitos de ejercicio o de fuerza, entrenar el día de descanso, correr fuerte cuando hay trote suave, etc. En conclusión por este período pasamos todos indefectiblemente, y es aquí, donde se produce la transformación en un verdadero corredor, esto, sin importar el nivel alcanzado.

6º Estadío: Corredor obsesivo:

Le he llamado así, a un período por el cual no todos pasan, aquí es donde muchos corredores llegan cuando comienzan a obsesionarse con diversos temas que tienen que ver con las carreras o el entrenamiento, algunos se ponen excesivamente cuidadosos con la alimentación, llegando al extremo de no poder disfrutar de una comisa en una reunión familiar. Otros se transforman en reyes de la estadística, conocen a todos los rivales, saben sus marcas, el lugar donde mejor corren; sus pensamientos giran continuamente, en torno a la marca que creen que deben hacer en tal o cual carrera, o el adversario al que le deben ganar. Los que arriban a este estadío casi siempre terminan con algún momento de infelicidad, ya que tarde o temprano, se encuentran con lo que ellos creen que es un fracaso, sin poder entender que el deporte está hecho, justamente, del ganar y del perder, de las buenas y malas carreras, y que siempre tenemos revancha. Otros se hacen adictos al entrenamientos, quieren correr todos los días del mes, y si es posible en doble o triple turno, con tal de no perder un día de entrenamiento, son capaces de correr alrededor de una mesa (obviamente, la mayoria de las veces, esto termina en sobreentrenamiento, lesiones musculares, articulares, enfermedades). También están los que no pueden perderse ninguna carrera, llegan a pensar que si ellos no compiten la carrera se suspenderá. Tienen un gran sentido de culpa cuando no participan, y ni hablar de si son candidatos a llevarse un premio. Para estos corredores, las categorías, son el aspecto más relevante a tener en cuenta para la organización de una competencia.

7º Estadío: Corredor maduro o experimentado

Están en este estadío aquellos corredores que y atienen varios años de entrenamiento y muchas carreras encima. Su vida deportiva tuvo buenos y malos momentos, seguramente ha pasado por más de una lesión, ya no estrena zapatillas el día de su carrera más importante, valora más que el objetivo alcanzado, el camino transitado. Disfruta de cada entrenamiento, poniendo las dosis justas de pasión, cordura y placer, logrando así casi el equilibrio que le permitirá perdurar en la actividad, transformándola en un estilo de vida sana. Los corredores en este período valoran y respetan la tarea de su profesor y el plan de entrenamiento, son personas a las que los entrenadores escuchan para la preparación del programa de entrenamiento anual. Eligen las carreras que realmente pueden correr y no abusan de la competencia. Habitualmente no se lesionan con frecuencia, ya que han aprendido a conocer los límites del cuerpo. Es el llegar a este estadío el verdadero objetivo que todo corredor debería tener.-

Prof. Pablo Silguero
www.legroup.com.ar

viernes, 16 de marzo de 2007

¿PORQUÉ EL DEPORTE AVENTURA?

Algunos llegan del atletismo atraídos por las verdes sendas, otros de deportes en equipo, como el rugby y el hockey -como en mi caso-, queriendo re-encontrarse con ese espíritu de equipo difícil de comparar, también están los del mountain bike con ansias de nuevos desafíos e incluso están los que jamás hicieron deportes y venciendo su timidez se acercaron a probar.

Cada uno por un motivo distinto, con su historia personal, sintió curiosidad, se sintió atraído, y se decidió a intentar. Primero su gran victoria fue terminar la carrera y luego empezó a entrenar un poquito más y más, con la idea de sufrir menos y disfrutar más de los paseos y paisajes fabulosos.

Está claro que este no es un deporte para iniciarse desde chicos, es un deporte que se elige por motus propio, un deporte que se empieza a conocer despacito y termina transformándose en una filosofía de vida. Deporte en contacto directo con la naturaleza, que nos enseña a cuidarla y respetarla. Deporte que nos exige sacrificarnos al máximo, y seguir adelante aún en las condiciones más duras. Deporte lejos de los grandes titulares y de los flashes, pero tan cerca de nuestro espíritu.

Los que hacen Deporte Aventura no hay una vez que no se pregunten por qué sufrir tanto. La respuesta es simple: La satisfacción de haber cumplido el objetivo es tan inmensa que no se puede expresar en palabras. Las sensaciones que pasan por la cabeza de los corredores es amplísima, desde la desolación más grande hasta la euforia indescriptible. El punto es que esos momentos se transforman en inolvidables, dejando una marca imborrable y ansias de nuevos desafios.
¡LA VIDA ES UNA AVENTURA .... AVENTURATE A VIVIRLA!